LA EDUCACIÓN, UNA TAREA LIBERADORA
El don de la enseñanza a permitido que muchos maestros y maestras hagan de vida educativa un verdadero apostolado. La tarea siempre ha sido dura, pero desde cada experiencia vamos valorando el verdadero aporte que se brinda en las aulas de los centros educativos más alejados del cantón y de la provincia.
Eleonora Cisneros, a pesar de no ser saquisilense de nacimiento, le ha entregado a esta tierra más de 30 años de su vida en la formación de varias generaciones de jóvenes. Con lagrimas en los ojos recuerda que su sueño fue ser enfermera, pero lamentablemente la muerte de su madre hiso que renuncie a su sueño y tuvo que asumir la responsabilidad del cuidado de sus hermanos.
La tenacidad, la constancia y las ganas de servir hicieron que Eleonora asuma la tarea de ser formadora de niños y niñas, en un inicio de los sectores de la montaña en la provincia de los ríos, luego fue el amor el que le hiso renunciar a su querido y natal Pelileo para entregarle todo su aporte a la educación de nuestros niños y niñas del cantón Saquisilí.
Aquí en el cantón fue en el sector rural donde inició su tarea de
enseñanza, para luego incorporarse a la escuela de educación básica Republica
de Colombia, en donde sirve como maestra hasta su jubilación.
Siempre será reconfortante en la tarea de la docencia reencontrarse con quienes formaron parte de este proceso educativo y saber que la semilla a germinado en tierra fértil, esos son momentos que en realidad le llenan de emoción destaca Eleonora.
La tarea de la educación siempre será un modelo digno de imitarse y de
recordarla en cada paso de la página de la historia de los pueblos, pues junto
a grandes maestros y maestras, siempre florecerán grandes seres humanos.
Gracias señorita Eleonora por el aporte brindado en las aulas de nuestro
querido Saquisilí, la recompensa va cosechándose día a día en cada profesional,
en cada madre o padre de familia que tuvo la suerte de ser parte de su proyecto
de vida como maestra.